Abrir mi correo
en el computador
esperando encontrar
un email tuyo
y no encontrarlo
abrirlo cada día
cada minuto
y no encontrarlo
y tener miedo
de mirar mi correo
y pasar los ojos
por cada mensaje
buscando el tuyo
y no encontrarlo
y estar a punto
de romper la pantalla
de un puñetazo
y no encontrarlo
pero abrirlo de nuevo
y de repente
ver tu nombre
y leer el texto
aguantando apenas
la respiración
y llegar temblando
a la última línea
a la última palabra
y no querer respirar
nunca más en la vida
y querer caer muerto
encima del teclado.
Óscar Hann , Esperando tu email
Gracias Óscar, por regalarme la esperanza de no haber sido la única con una cabeza capaz de azotarse contra un teclado y vivir para contarlo (y escribirlo con esa delicadeza de letras vanguardistas)